Salida de la prueba PISA, un retroceso más en el sistema educativo de México

Salida de la prueba PISA, un retroceso más en el sistema educativo de México

Foto: Enfoque

En los últimos años se acrecentaron las deficiencias del sistema educativo del país y muestra de ello fueron los resultados del Programa para la Evaluación Internacional de los Estudiantes, o prueba PISA, donde se evidenció que los alumnos de México retrocedieron en lectura, matemáticas y ciencias. Ahora, México podría quedar fuera de esta prueba que evalúa la situación académica.

 

De acuerdo al director de Educación y Competencias de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Andreas Schleicher, México podría salir de la prueba PISA 2025 tras darse a conocer que omitieron los requerimientos para hacer la prueba el próximo año. Esto podría deberse a que en 2022 la prueba PISA mostró el retroceso educativo del país.

 

A falta de que se concrete o haya un pronunciamiento oficial del gobierno federal o la SEP, se cree que este sería un retroceso aún mayor para la educación del país, aunado a los rezagos que dejaron los últimos resultados y la pandemia. La salida de México de la prueba PISA se da en medio de la implementación del nuevo modelo educativo, la Nueva Escuela Mexicana (NEM) que ha sido fuertemente criticada.

 

¿Qué impacto tendría dejar la prueba PISA?

 

La prueba PISA sirve para medir las capacidades, conocimiento y habilidades de los alumnos de 15 años, los de educación básica obligatoria, en áreas como la lectura, ciencias naturales y matemáticas, a fin de evaluar el progreso que tienen bajo el modelo educativo de cada país. Se centra en el alumnado de esa edad porque son los que están más próximos a iniciarse en la vida laboral y económica.

 

En la última prueba se aplicó, en el 2022, se exhibió a México por sus malos resultados en los tres rubros. El 66 % de los estudiantes mostraron bajo rendimiento en matemáticas, mientras que en lectura fue el 47 % y en ciencias el bajo rendimiento se vio en el 51 %. Los resultados fueron peores que los de la edición del 2018 y por debajo que los de países con economías parecidas.

 

El primer efecto adverso que vería la educación mexicana es la pérdida de referencias internacionales para medir el progreso estudiantil. México participa en la prueba desde el 2000 sin interrupción, hasta ahora, por lo que abandonarla haría que ya no se tenga un punto de partida para identificar áreas de oportunidad.

 

La prueba no sólo sirve para medir la situación de un país en educación, sino que también es útil para que los gobiernos vean las áreas en que fallan sus estrategias y las políticas públicas que podrían implementar en el futuro. Al no ser parte de esta evaluación, además de no haber comparaciones con países de todo el mundo, tampoco habría una medición objetiva del sistema educativo.

 

Políticos de oposición y especialistas señalan que esto también afectaría a las relaciones con la organización y otros países, ya que el principal motivo de que se abandone la prueba PISA serían los citados malos resultados del 2022. Esto, se cree, mandaría el mensaje de que México ya no tiene el compromiso que merece un área tan importante como la educación.

 

Esta decisión tan controvertida se sumaría a otros hechos que han permeado en la educación del país, empezando por la pandemia por covid-19. Según cifras del INEGI, antes de la pandemia había cerca de 4 millones de niños sin acceso a la educación, y tras la emergencia sanitaria dicha cifra se elevó a más de 5.3 millones en niveles como preescolar, primaria y secundaria.

 

El abandono escolar cobra relevancia porque los alumnos del país no se desarrollan plenamente en sus estudios, provocando que no haya progreso y resultados positivos en las evaluaciones como la PISA.

 

Por si fuera poco, también está la NEM, que es el modelo que plantea el gobierno federal con Marx Arriaga como el encargado de coordinarla. Esta ha sido criticada por no cumplir con estándares de calidad y por otorgar materiales de calidad incierta como los libros de texto que se usan en este ciclo escolar. Esos factores contribuyen a que no haya avance en educación y sumado al abandono de la prueba PISA, afectarían directamente al desarrollo educativo de los estudiantes de México.

 

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